sábado, 28 de noviembre de 2009

La última

Hasta el peor de los augurios sobre el tiempo que estaríamos sin campo se ha quedado corto, la situación por la que estamos pasando está cercana a que la podamos catalogar de desastrosa.

Entrenando cada equipo en un lugar distinto, se ha perdido el espíritu de club totalmente, y digo entrenar por decir algo, porque lo que estamos haciendo desde principios de temporada en el recinto ferial, (y suerte que por lo menos tenemos eso), no es exactamente entrenar, o por lo menos, es hacerlo en unas condiciones totalmente inapropiadas, y se podrían mejorar un poco.

En las últimas semanas os puedo decir que mi equipo, (por ejemplo), estamos entrenando totalmente en penumbra, casi sin luz y eso sumado a las malísimas condiciones del terreno, (durísimo, lleno de chinos y piedras, con baches y con bocas de riego y alcantarillas dentro del mismo), hace que cada entrenamiento sea poner en riesgo que se nos lesione cualquier crio.

Lo que hay es lo que hay, eso está claro, pero luego hay cosas que tienen poca explicación, como el hecho que llevemos tres meses entrenando en el campo de fútbol con los equipos mayores y los jugadores se tengan que vestir en el vesuario del pabellón ya que el encargado del campo no ve oportuno limpiar los propios vestuarios del campo de fútbol, incluso se ha producido un robo de dinero a uno de nuestros jugadores amateur.

Se trata de poner buena cara al mal tiempo, y así lo estamos haciendo, nadie nos puede reprochar nuestra actitud, y eso que tenemos motivos más que de sobra para quejarnos, pero no puede decir nadie que nos haya escuchado alzar lo más mínimo la voz, pero cada semana que pasa va subiendo la indignación en todos y hay quién empieza a dar síntomas de desesperación.

Con ese panorama tampoco le podemos pedir a los equipos que encima tengan buenos resultados deportivos, estamos compitiendo en una manifiesta inferioridad de condiciones, simplemente con participar en las competiciones de forma digna podemos darnos por satisfechos, esperemos que el campo nuevo esté listo lo antes posible y podamos tener un fin de temporada mejor.

Vamos a quedarnos con lo positivo, vamos a contar con unas magníficas instalaciones y, por otro lado, estamos haciendo una magnífica labor en los equipos pequeños y eso es sembrar para recojer en unos años, porque, no lo olvidemos, cuando pase esta pesadilla del campo, viviremos los mejores años de fútbol de Bonares, no os quepa duda alguna.

(Publicado por Manolo Garrido en el periódico Bonasport del mes de Octubre)